El Consorcio RSU de Ciudad Real aprueba por unanimidad una modificación de crédito para financiar un proyecto, junto con fondos Next Generation UE, para implantar la nueva recogida de biorresiduos

Se aprobaron también dos propuestas de prestación de servicios, por parte de Emaser, de la Gestión de Abastecimiento de Agua potable en Alta para los municipios de Alhambra y Carrizosa El Consorcio de Residuos Sólidos Urbanos de Ciudad Real, RSU Medio Ambiente, aprobó por unanimidad ayer todos los puntos del último Consejo de Administración, en el que salió adelante el expediente de crédito extraordinario para pagar la parte correspondiente de la implantación de la nueva recogida separada de biorresiduos en áreas del Consorcio, por un importe de 462.352 euros, correspondiente al primero de los 3 proyectos sufragados con fondos Next Generation de la UE en los que trabajan. En el Consejo de Administración de RSU Medio Ambiente de mayo, presidido por Carlos Jesús Villajos, diputado provincial y alcalde de Porzuna, se aprobaron también ayer sendas propuestas de prestación de Gestión de Abastecimiento de Agua Potable en Alta, por parte de la empresa mixta Emaser (dependiente del Consorcio), en los municipios de Alhambra y Carrizosa. Igualmente salió adelante la aprobación de un expediente de crédito extraordinario, que según explicó el gerente del RSU, José Manuel Labrador, irá destinado a asumir la parte que le corresponde al Consorcio del primer proyecto de implantación de la nueva recogida separada de biorresiduos en áreas del consorcio. “Este primer proyecto, de los 3 en los que trabaja el Consorcio, cuenta con un presupuesto inicial de realización por importe de 1.497.910 euros, de los cuales los Fondos Next Generation de la Unión Europea, dentro del programa de Mejora de Gestión de Residuos Municipales y el PIMA de Economía Circular, aportan el 90%, sufragando el 10% restante el Consorcio, ascendiendo la cantidad a 147.791 euros, importe al que debe añadirse el IVA, que son otros 314.561 euros, lo que hace un total de 462.352 euros”, añadía Labrador. Este proyecto es para cumplir con el Plan Estatal Marco de Residuos y Plan Integrado de Gestión de Residuos de Castilla-La Mancha, que establecen la obligatoriedad de establecimiento de un sistema de recogida selectiva de biorresiduos, que permita la consecución de los objetivos de recuperación de los mismos de forma separada, así como el establecimiento de dicho sistema en los municipios mayores de 5.000 habitantes. El Consejo de Administración del RSU aprobó también certificaciones de obra de otros proyectos y otras facturas correspondientes al primer trimestre. A continuación se celebró el Consejo de Administración de la empresa pública Residuos Sólidos Urbanos de Castilla-La Mancha S.A. (RSUSA).
El Consorcio RSU reforzará la formación en seguridad laboral y la vigilancia de la salud de su plantilla en 2024

El Comité de Seguridad y Salud Laboral de Residuos Sólidos Urbanos de Ciudad Real celebra su última reunión del año Los datos de siniestralidad de este ejercicio están en sintonía con los de años anteriores, a pesar del aumento de la actividad La vigilancia en el cumplimiento de las normas de seguridad será un pilar esencial en la política preventiva de la empresa en próximos años El Consorcio de Residuos Sólidos Urbanos (RSU) de Ciudad Real reforzará en 2024 su política de prevención de riesgos laborales con nuevas acciones que permitan incrementar la seguridad laboral y la vigilancia de la salud de su plantilla, así como seguir reduciendo los datos de siniestralidad que, a pesar del aumento de actividad, en este 2023 se han mantenido en sintonía con años anteriores. Así lo ha asegurado el gerente de la entidad, José Manuel Labrador, tras presidir el último Comité de Seguridad y Salud Laboral de RSU de este año, dirigido por la jefa del departamento de Prevención de Riesgos Laborales, Marisol Cuesta, y en el que han participado tanto representantes de la parte empresarial del área de Personal como la representación social de la empresa, en calidad de delegados de prevención. Labrador ha asegurado que se van a incrementar las campañas de formación, información y concienciación de la plantilla en prevención de riesgos: “Esta estrategia va a ser un pilar esencial en la política de seguridad laboral de la empresa en los próximos años. Creemos que es la mejor manera de avanzar en la reducción de los siniestros y su gravedad. También vamos a incrementar la vigilancia de la salud incluyendo nuevas pruebas de detección temprana en las revisiones médicas”. En este sentido, cabe destacar que uno de los puntos del orden del día fue el análisis de la siniestralidad, que cierra el ejercicio en sintonía con años anteriores, a pesar del aumento de actividad. En total, han sido 311 jornadas de baja laboral en 2023, lo que supone 200 menos que en 2021 y un dato similar al año pasado. Además, y en lo que se refiere a formaciones, los miembros del Comité han podido conocer que durante lo que llevamos de año se han realizado casi 150 formaciones de diversa índole: trabajos en altura, especialización en manejo de maquinaria de todo tipo y diferentes puestos de trabajo, protección contra incendios o reciclaje. Igualmente más de 200 trabajadores/as han recibido información sobre los riesgos de su puesto. En lo que respecta al terreno de la vigilancia de la salud, el próximo ejercicio traerá como novedad la vigilancia para la prevención del cáncer de próstata y el cáncer de ovarios para los trabajadores mayores de 45 años y todas las trabajadoras de la empresa que recibirán este nuevo servicio en pro de la salud de la plantilla. En el año que finaliza, se han realizado un total de 280 exámenes de vigilancia de la salud y 13 consultas. Por otro lado, y en lo que se refiere a las instalaciones, el próximo año RSUSA afrontará la mejora y adaptación de sus instalaciones a reglamentos como el de protección contra incendios, con inversiones que afectaran a las naves talleres de los centros de vertedero y Almagro. Igualmente, se realizarán inversiones en la mejora de las dotaciones de dichos lugares de trabajo en todas sus zonas de explotación. Finalmente, se realizarán mejoras también tanto en los equipos de protección individual como en los colectivos y se reforzará la vigilancia en el cumplimiento de las normas de seguridad, así como la promoción de éstas.
Respuesta del Consorcio RSU a las afirmaciones del portavoz de la oposición en la Diputación Provincial

Recuerda el presidente del RSU de Ciudad Real al portavoz socialista en la Diputación que “la entidad estaba en una situación tremendamente crítica que solo se ha podido subsanar gracias a la subvención recibida de la actual Diputación Provincial” El presidente del Consorcio de Residuos Sólidos Urbanos de Ciudad Real, Carlos Villajos, sale al paso de las recientes declaraciones del portavoz de la oposición en la Diputación, el socialista José Manuel Bolaños, donde citan al Consorcio. Carlos Villajos deja claro que “lo cierto es que sin entran a valorar si nos parece bien o mal, o más o menos efectivo, la realidad es que la Ley 7/2022 crea un nuevo impuesto sobre el depósito de residuos en vertedero. Es un impuesto que ha creado el Gobierno Central como medida para el fomento del reciclado, la educación ambiental y desincentivar el depósito de residuos en vertedero. Además la recaudación del impuesto se asignará a las Comunidades autónomas, en este caso la Junta de Comunidades”. Para el presidente del RSU de Ciudad Real, “podemos estar más o menos de acuerdo pero es la propia Ley la que establece que son sustitutos de los contribuyentes los operadores de los vertederos, y que los sustitutos deberán recaudar el impuesto, realizar las liquidaciones a la administración tributaria correspondiente y repercutir el importe del impuesto al contribuyente, que estará obligado a soportarlo”. Otra realidad, para Villajos, es que “desde Residuos Sólidos Urbanos de Castilla-La Mancha (RSUSA) no se informó de la entrada en vigor de este nuevo impuesto el 1 de enero de 2023, y, que en agosto RSUSA tuvo que hacer frente a las primeras liquidaciones, generando una previsión de resultado contable negativo de 3.200.000 millones de euros y dejando a la entidad en una situación tremendamente crítica que solo se ha podido subsanar gracias a la subvención recibida de la Diputación Provincial de Ciudad Real para gasto corriente”. Desde RSUSA ya se ha informado a los Ayuntamientos de esta situación, “y de que en cumplimiento de la Ley 7/2022 este nuevo impuesto debe recaer sobre el contribuyente como medida de concienciación y para desincentivar el depósito de residuos en vertedero como está ocurriendo en la inmensa totalidad de los operadores de residuos de toda España”, termina diciendo el presidente del Consorcio.