La cosecha 2020 de azafrán amparado bajo la DOP Azafrán de La Mancha finaliza con 451,5 kilogramos

La producción está por debajo de las previsiones iniciales y de la media de los últimos años; la superficie de cultivo prácticamente se ha mantenido con 126 hectáreas. Ha sido una cosecha irregular con zonas que han mantenido la media de producción y otras en las que ha bajado bastante debido probablemente a factores meteorológicos como las heladas de marzo y las elevadas temperaturas durante la campaña.

El Consejo Regulador valora positivamente la ausencia de contagios y que el 100% del azafrán producido ha superado con creces los estándares de calidad que exige el pliego de condiciones de la DOP. Como contrapartida lamenta que la producción no haya alcanzado la media de los últimos años

La cosecha de azafrán de los productores inscritos en la Denominación de Origen Azafrán de La Mancha ha ascendido este año a 451,5 kilos, una cantidad inferior a las estimaciones iniciales que apuntaban a que la producción podría mantenerse en los 600 kilos de media de los últimos años.

Aunque la superficie de cultivo prácticamente se ha mantenido respecto a la campaña anterior, con 126 hectáreas, la campaña 2020 ha sido bastante irregular con zonas en las que se ha mantenido la media o incluso incrementado la producción y otras en las que este año se ha recolectado mucha menos flor. Las causas podrían estar, según las consultas realizadas a los productores y organismos especializados en el desarrollo del cultivo, en factores meteorológicos como las heladas de marzo y las altas temperaturas a partir del mes de septiembre.

El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Azafrán de La Mancha cierra así una campaña 2020 que considera mejorable en cuanto a producción, pero en la que el 100% del azafrán producido has superado con creces los estándares de calidad que exige el pliego de condiciones de la DOP. Además, se valora positivamente el esfuerzo realizado por los productores, tanto en el campo como en los centros de transformación, por mantener las medidas de seguridad e higiene y evitar de este modo incidentes relacionados con el coronavirus

“Terminamos el 2020, un año que podemos calificar de agridulce, agrio es el sabor que nos deja el que no se hayan cumplido las previsiones y que la cosecha haya sido inferior a lo que estimábamos, pero a la vez con la satisfacción haber salvado una campaña con una producción de calidad excepcional, muy por encima de lo que exige el pliego de condiciones de la DOP, y que se presentaba muy complicada por la situación sanitaria que vivimos en toda España debido a la COVID-19”, explica el presidente del Consejo Regulador, Carlos Fernández.  

En este sentido, recuerda que desde la Denominación de Origen Azafrán de La Mancha se incidió mucho a los asociados en la necesidad de que se guardaran las medidas de seguridad en toda la cadena de producción, tanto en la recogida como en la monda de la flor y la deshidratación del azafrán y que se implantaran los protocolos del sector agrario para limitar las cadenas de contacto.

Finalmente, el presidente avanza que el Consejo Regulador ya está trabajando en sus acciones promoción y formación para el año 2021 en el que, si la situación mejora, se retomarán actividades como el curso “Conoce el Azafrán de La Mancha” o los talleres dirigidos a estudiantes de Cocina y Hostelería y se pondrán en marcha otras de carácter novedoso.

Sobre la Fundación DOP Azafrán de La Mancha

La Fundación Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Azafrán de La Mancha es el organismo que representa, defiende, garantiza, investiga, desarrolla y promociona el azafrán amparado por esta figura de calidad, la única especia de esta naturaleza que dispone de este reconocimiento a nivel nacional. La Fundación cuenta con 250 productores asociados y 16 empresas envasadoras inscritas. La zona de producción de la DOP Azafrán de La Mancha incluye 335 municipios de Castilla-La Mancha, toda la provincia de Albacete, 38 municipios en Ciudad Real, 173 municipios en Cuenca y 38 municipios en Toledo. La comprobación de que los productores y los envasadores, cada uno en su ámbito de actividad, cumplen del pliego de condiciones, lo lleva a cabo un organismo de control independiente e imparcial, autorizado por la administración competente, y acreditado por ENAC en la norma UNE-EN ISO/IEC 17065 o norma que la sustituya.